miércoles, 30 de diciembre de 2009

Mobbing encubierto en las Universidades

Noticia en el Periódico de Aragón: aumentan los enfrentamientos entre el becario y su profesor.

Sin comentarios... por el momento.

jueves, 24 de diciembre de 2009

No somos digitales

España está por debajo de la media en alfabetización digital, según un estudio de la Comunidd Europea.

EnlaceEstamos en una sociedad en la que las tecnologías nos rodean y así se congratulan muchos de nuestros políticos. Los indicadores que usan para definir nuestra sociedad como tecnológica son, entre otros, el número de líneas ADSL o los ordenadores en los hogares.

Mientras, observando el uso de estas tecnologías y el verdadero conocimiento de ellas, uno se da cuenta de la realidad, mucho más acorde con el estudio que, en mi modesta opinión, aún nos deja demasiado bien.

Total desconocimiento de las posibilidades reales de la tecnología; el único uso útil es las descargas P2P (habría que ver qué pasaría con la contratación de ADSLs si se impusiese una legislación estricta contra ello), ver videos "chorras" de Youtube o jugar al WoW; se abronca a un profesor porque confunde informática con Internet, "...que eso del Internet no tiene que ver con la informática (sic)";etc.
¿Cómo solucionamos eso? ¿Soltando miles de netbooks en las aulas?

Pues va a ser que no.

El problema es más profundo, como siempre. No se puede pedir que nuestros nativos digitales sean de verdad nativos digitales si el primer contacto "reglado" (supuestamente organizado, bien diseñado, con conceptos claros, relacionados con la práctica que se supone deben aprender,...) es en una asignatura, Tecnología, mezcla de mil contenidos sin relación (electricidad, sistemas digitales, ofimática, tratamiento de la madera,...). Y la continuidad no es que esté mejor: dos optativas, que si cogen una no cogen la otra, a pesar de estar en cursos distintos.

Pero en la Universidad tampoco está mejor, mientras quien forme a estos nativos digitales en las nuevas tecnologías sean académicos desconectados del mundo actual, anclados en sistemas anticuados tanto en contenidos como en metodologías docentes. Muchos de ellos siguen empeñados bien en seguir enseñando Word, en lugar de las posibilidades de participación de la web2.0 y sus plataformas (¿o será que no tienen ni idea de qué es eso de la web2.0?), o bien "frikis" disfrazados de entendidos que creen que lo que un alumno de ciencias desea es saber los entresijos de ese tan "claro e intuitivo" lenguaje de programación como es Java.

Y claro, acaban su formación y nuestros nativos digitales siguen confundiendo navegador con Google, siguen subiendo fotos de juergas a su red social (aunque en el futuro les cueste el trabajo) o diciendo que Windows, único SO que existe en el mundo-mundial, es "esa cosa que sale en la pantalla con dibujicos (sic)".

En fin...

viernes, 2 de octubre de 2009

La Universidad de Zaragoza no es (todavía) Campus de Excelencia

Un mes desde el último post, pero es que ha comenzado el curso y se me lleva el tiempo los EduBlogs con mis alumnos. A pesar de ello, me ha parecido importante dedicar un tiempo (poquito) a la noticia que hoy se ha sabido: la universidad de Zaragoza se queda sin la clasificación de Campus de Excelencia.

Pues es una pena pero... ¿alguien lo esperaba? Al menos a día de hoy y en comparación con lo que se sabe de otras Universidades Españolas.

La Universidad de Zaragoza es centro puntero en cuanto a resultados de investigación en algunas áreas. La facultad de Ciencias, el Centro Politécnico Superior, ... y otros (y no todo personal del centro, determinados grupos de investigación de los nombrados) están reconocidos internacionalmente.

Pero no debe olvidarse que una Universidad, además de cuna de nuevo conocimiento, debe ser centro de formación de Excelencia, de futuros investigadores y mejores profesionales. Y ahí es donde me da a mi que la cosa flojea. Porque... ¿qué puede esperarse de una Universidad en la que insignes catedráticos creen que Bolonia es mandar trabajos? O que insiten en decir que, por ejemplo, un matemático no tiene competencias (confundiendo competencia con atribución profesional). O que no tengo porque convencer a nadie para estudiar algo, que lo hacen por amor al arte. O que "eso de los blogs y las wikis son tontadas que no valen para nada, como mucho el correo" (y luego no encuentran nada en su buzón)... O...

Y podría seguir así mucho tiempo, desgranando, detallando, dando ejemplos y contando anécdotas que demuestran lo más rancio de esta nuestra Universidad.

También es cierto que muchos profesionales de la Universidad están listos, preparados y con ganas de hacer las cosas bien. Por eso la Universidad de Zaragoza se ha quedado a las puertas. Afortunadamente, hay gente que entiende Bolonia, que sabe lo que debería hacerse para conseguir una Universidad de calidad de verdad, no sólo grandes palabras y seguir con la clase magistral... pero "mandando trabajos, que así somos Bolonia".

Por lo que se, el equipo actual que dirige nuestra Universidad va bien encaminado, las ideas son buenas, el proyecto, mejor. La batalla está en lo rancio que encuentren por el camino (que hay mucho).

Y, no lo olvidemos, la batalla también debe contar con el apoyo de las instituciones de gobierno (véase DGA) y en su convencimiento (o no) de que el mejor activo para salir de una mala racha (¡maldita crisis!) es la formación de buenos profesionales y el potenciamiento de la Investigación que pueda convertirse en Innovación.

Si desde el Rectorado se consigue vencer, pronto tendremos una Universidad Excelente. En otro caso, tendremos lo que queremos (o lo que nos merecemos...).

martes, 1 de septiembre de 2009

Cloud Computing= ¿SOA bien hecho?

Me llama la atención la noticia siguiente que recibo por uno de los boletines a los que estoy suscrito: Cloud: the SOA we always wanted, but never had? Se refiere la noticia (en parte) a un panel de discusión en el que se enfrentaron ambos conceptos: el tan actual Cloud Computing y las Arquitecturas Orientadas a Servicios (SOA, siglas inglesas).

De entre las cosas que se dicen me ha gustado la frase que he puesto por título a la entrada "¿Es el Cloud computing un SOA bien hecho?" La conclusión general a la que se llega (o al menos eso concluyo de lo leido y que, además comparto, a riesgo de simplificar mucho todo lo que se dice), es que ambos son conceptos similares pero vistos desde distintas perspectivas. SOA es una visión técnica, arquitectural, casi podríamos decir académica, del concepto Cloud Computing, más de negocio.

Podríamos decir que el término Cloud Computing ha sido el modo de vender, de monetizar, las infraestructuras de tecnologías basadas en servicios. Hay más consideraciones, por supuesto, como que el Cloud Computing puede suponer la externalización de servicios a organizaciones ajenas a las propias internas de IT que pueda tener la empresa pero, básicamente, el Cloud Computing es la visión de negocio, la utilidad desde esa perspectiva del SOA.

Acompaña al artículo anterior otro de título When is a cloud not a cloud? que lo completa en cierta manera. En el mismo, y resumiendo mucho, se plantean tres tipos de "nubes", es decir, tres escenarios en los que se usan la filosofía Cloud Computing pero que son claramente distinguibles. Dos de dichos escenarios son los extremos, es decir, el uso por parte de la empresa de servicios Cloud Computing totalmente abiertos y accesibles por cualquiera en la red, en un extremo, frente a plataformas cerradas, tipo Intranet, sobre las que se "instalan" servicios de tipo Cloud para uso interno. El primer escenario es el que la empresa privada rehuy, por miedos e inseguridades ante una posible pérdida de control de su información y los sistemas que la soportan. Pero el segundo es aquel que no puede llamarse Cloud Computing y que, y esto es opinión mía, es más cercano a la filosofía SOA de los orígenes que a la filosofía de computación en la nube.

El tercer escenario es, obviamente, el intermedio. Una arquitectura basada en el Cloud Computing, con la filosofía de apertura asociada al concepto, pero con herramientas que permitan el control de lo que es público y privado, de lo que la empresa controla o lo que se deja en manos de terceros.

A pesar de todo, aún me quedan algunas dudas acerca de las diferencias entre esta nueva "Ola" de servicios en la web y los conceptos antiguos de extranets o intranets con acceso vía web.

Seguiremos leyendo....

viernes, 28 de agosto de 2009

Monetizar Youtube y repartir beneficios

Publican varios diarios en el día de hoy (Heraldo de Aragón, La Voz de Galicia,...) la noticia de que Youtube pagará a los autor de los videos más vistos parte de los beneficios por publicidad. Anoto la noticia porque está en relación directa con uno de los capítulos del libro "La alquimia de las multitudes", del que acabo de publicar una entrada.

Se plantea en el libro la "monetización" de los negocios alrededor de la web2.0 que, por ahora, parece tener como único recurso la publicidad pero también, y esto es lo que me parece interesante de la noticia, las dudas acerca del aprovechamiento de los grandes de la web2.0 del trabajo altruista de la multitud.

Repartir beneficios con los autores de los videos más vistos, es un ejemplo de este hacer participes de la monetización a los autores de lo que en La Red podemos encontrar.

No deja claro cómo ni cuánto, pero es un ejemplo de que algo debe moverse.

Alquimistas del conocimiento

El libro La Alquimia de las Multitudes se titula de ese modo en contraposición al de James Surowiecki, The Wisdom of Crowds (La sabiduría de las Masas o, como se ha traducido en su edición española 'Cien mejor que Uno...'). La diferencia entre sabiduría y alquimia entre los títulos de ambas obras se justifica en el propio libro al entender que el concepto de sabiduría de las masas o inteligencia colectiva son demasiado ambiciosos y presuponen un proceso controlado y riguroso que convierte la gran cantidad de información actual en auténtico conocimiento. Los autores prefieren el término alquimia ya que, como muestran a lo largo del libro, el fenómeno de la Red, con sus herramientas de colaboración que han permitido la presencia de cualquiera con acceso, es capaz de lo mejor pero también de lo peor. El resultado de la acción de las masas en La Red es más cercano a una suerte de alquimia en la búsqueda de la piedra filosofal, que es el conocimiento, y unas veces es alcanzada mientras que otras no.

El libro se estructura en tres partes, divididas en tres capítulos cada una de ellas:

  • La Web de Hoy, en la que se describen con profusión de ejemplos las herramientas existentes en la web, el uso de las mismas por los que el la segunda parte denomian webactores y cómo estos usos han generado lo que llaman una dinámica relacional entre personas, documentos y datos de la red.
  • La Alquimia de las Multitudes, donde se describe el concepto central del libro, derivvado de esa dinámica relacional y se habla accerca de los que lo provocan o, como los autores los llaman, los webactores.
  • Lo Que Está Cambiando, en el que detallan cómo esa dinámica relacional influye y provoca cambios en los modelos de negocio de la empresa, en general, y los medios de comunicación, en particular.

El libro está plagado de referencias e incluye, entre el texto principal del libro, breves comentarios a otras obras o resúmenes de entrevistas a figuras claves del mundo de la Red, que ayudan a comprender las tesis que los autores presentan.

La lectura del libro se muestra, en ocasiones, algo irregular, quizás por la escritura "a dos manos" de la obra, pero está repleto, además de las referencias antes citadas, de ideas y reflexiones muy actuales.

Cómo los jóvenes se apropian de la red y la utilizan como un elemento de socialización más; cómo la multitud en general la utiliza y participa para comunicar, remezclar y crear nuevos usos en ocasiones no pensados por los propios creadores de los servicios web, nuevo concepto que supera al de software autónomo; las dudas por esa participacción ¿quién se aprovecha del trabajo del usuario? ¿debe ser remunerado? ¿tiene valor toda esa información en la web o es el resultado de un conjunto de amateurs sin conocimientos suficientes que se han apropiado de un espacio que deberían ocupar (o que ocupaban hasta ahora) expertos?; y, finalmente, la empresa y sus eternas dudas acerca de los nuevos modelos de negocio que les están siendo impuestos, en los que la gratuidad del producto es casi inevitable (véanse las referencias al negocio basado en bits de Negroponte) y la presencia en la web y su uso como plataforma de trabajo puede aportarles una nueva dirección o hacerles quedar en el camino, atrás en esa revolución que las mutitudes exigen e imponen.

En resumen, un libro que si se conoce el tema puede resultar en sus inicios algo "lento" pero que al finalizar, te ha hecho reflexionar desde posiciones a favor y en contra de toda esta revolución que en la actualidad está sucediendo alrededor de la web.

¿Somos ignorantes?


Siguiendo con la tónica de este verano (que me está resultando fructífero en lo que a lecturas atrasadas se refiere) os dejo un resumen de otro de los libros que me he leido.

La Sociedad de la Ignorancia está formado por tres ensayos, el primero de los cuales lleva por título el del libro y los dos siguientes, de manera similar a éste, llevan los títulos La Sociedad del Desconocimiento y La Sociedad de la Incultura. Sus autores Antoni Brey, Daniel Innerarity y Gonçal Mayos, respectivamente, profundizan en las bondades, riesgos y perjuicios (casi más en estos dos últimos) de la sociedad que la web2.0 y sus herramientas de comunicación están creando.

En la introducción a los tres ensayos, Antoni Brey, presenta el momento actual como un momento de cambio. Éste se hace patente considerando dos criterios claros, tal y como enuncia el autor: "nuestra capacidad como especie para cambiar nuestro entorno y la manera en que nos comunicamos de forma simbólica". Ambos son evidentes en nuestro tiempo. En el primero caso, las nuevas tecnologías de la información han provocado un cambio social y "un nuevo modo de de interpretar la realidad". En el segundo caso, también son evidentes profundos cambios en como transmitimos y nos comunicamos unos con otros, proceso en el cual la web es, actualmente, una herramienta fundamental.

Continúa el autor, en el primer ensayo de la obra y el más extenso de los tres que la componen, presentando una sociedad mercantilista en el tratamiento de la información y el conocimiento que de ella puede generarse. El autor se detiene en el análisis de ese concepto fundamental, conocimiento, producto que se persigue y para el que no se tiene un modelo claro de "negocio". Distingue, entre conocimiento y saber, considerando éste último como cualquier compendio de información organizado por el ser humano del que, mediante procesos de estudio y reflexión, puede extraerse el conocimiento.

Y esta distinción es la que permite al autor denominar a la sociedad actual, en primera instancia, Sociedad de los Saberes Productivos mejor que Sociedad del Conocimiento. Señala, además, el riesgo de no alcanzar nunca este último modelo de sociedad perseguido debido a la Infoxicación que sufrimos y la incapacidad del ser humano, como individuo, de procesar tal cantidad de información.

Con todo, el autor manifiesta sus dudas ante el medio, la Red, para generar conocimiento real o si, por el contrario, nos convierte en individuos superfluos en los razonamientos e "incapaces de concentrarse en un texto de más de cuatro páginas". Nos conduce, en definitiva, hacia una Sociedad de la Ignorancia, en la que la misma se acepta como tal e incluso se ensalza. Una sociedad en la que no falta expertos productivos en algún campo que la sociedad consumista demanda, pero de la que están desapareciendo los sabios con una visión global de la sociedad y de hacia donde va el ser humano.

En este escenario, señala el autor, los riesgos con los que nos enfrentamos son tres. El primero, el riesgo social de la brecha digital señalada por muchos autores. La segregación en clases incapaces de asumir estos nuevos desarrollos tecnológicos o sin posibilidad de disponer de los mismos frente a los nativos digitales reales, con acceso y dominio de las nuevas tecnologías. El segundo, el riesgo comentado de que la exaltación y normalidad de la ignorancia nos deje sin armas para enfrentarnos a retos cruciales que aparezcan en la natural evolución de la sociedad y el comportamiento humano. Y, finalmente, el tercer riesgo refiere a la consideración de la figura individual, del individuo, con dos vertientes extremas. Por un lado, que el individuo quede oculto en esa masa ignorante y, por otro, radicalmente opuesto, la exaltación del individualismo, aisladoo en la red, pero con el poder que le otorgan las herramientas sociales y su "potencialidad teórica de amplificar cualquier mensaje".

En el segundo ensayo, La Sociedad del Desconocimiento, reflexiona acerca de la sociedad que se ha planteado en el primero, desde el punto de vista del riesgo que hemos de asumir debido la inseguridad sobre el futuro hacia el que vamos. La Sociedad del conocimiento (o de la Ignorancia) afecta al poder, al estar el saber más repartido y descentralizado. El poder queda debilitado e incluso desautorizado. Y esta multitud de voces, en lugar de aumentar las certezas, generan multitud de opiniones y provocan, por tanto, mayor inseguridad. El futuro debe afrontar nuevas formas de obtención de conocimiento de manera colaborativa y métodos de gestión de la incertidumbre que permitan hacer avanzar a la sociedad.

El tercer y último ensayo, La Sociedad de la Incultura, es quizás el más crítico o, si se le da crédito, demoledor. La sociedad de expertos planteada por Brey, pero cada vez más carentes de "sabios" y la sociedad del Desconocimiento, plena de incertidumbres y sin saberes ciertos e inmutables, puede generar una sociedad inculta en aquellos saberes generales que pudieran hacer a las personas que la forman ciudadanos competentes en su vida. Llega incluso a plantearse la capacidad de la sociedad para tomar decisiones democráticas. Insiste en la incapacidad del individuo de absorver la cantidad de información actual, crecimiento que sigue una ley similar a la de Malthus acerca de la producción de alimentos y el crecimiento de la población humana. Esta velocidad en la generación de información lleva al ciudadano a la incultura a través de su obsolescencia, incapaz de seguir el ritmo del saber. Sólo la especialización, la sociedad de los expertos, puede mantenerse, pero "abocados a lo que los griegos clásicos llamaban idiotez o, al menos, una notable ceguera respecto al conjunto del mundo, de lo humano y de las necesidades globales de hoy".

Un compendio de tres ensayos muy críticos con esa faceta de nuestro tiempo que es la cultura alrededor de la red y las nuevas tecnologías, pero fundamentales para provocar procesos de reflexión que, como dicen los autores, son tan escasos en estos días d ela Sociedad de la Información.


sábado, 22 de agosto de 2009

Manual del ciber-scout

Podemos leer en el blog relacionado con el libro Grow Up Digital cómo la organización de Boy Scouts ha actualizado su famosísimo Handbook para incluir consejos sobre comportamiento y navegación por la Web.

Es llamativo cómo una organización que parece tan alejada del mundo de la tecnología (no soy gran conocedor de los boy scouts y quizás mi idea no sea correcta) integra en su manual este tipo de enseñanzas.

Y es que las políticas prohibicionistas amparadas en la seguridad de nuestros hijos son, en mi opinión, erróneas, poco efectivas e inadecuadas. El camino correcto (siempre en mi opinión, repito) es enseñar un buen uso y las grandes posibilidades que la web actual nos ofrece, sin olvidar en el proceso los riesgos y peligros a los que pueden enfrentarse .

Hay muchas webs que tratan de ayudar con ese miedo que, por simple desconocimiento, se tiene siempre de lo nuevo. Valga como ejemplo la web Chaval.es, en la que se puede encontrar un decálogo de buenas prácticas en Internet, para chavales y padres, así como un espacio para "ciberpadres".




viernes, 7 de agosto de 2009

Desde los ojos de un nativo digital

Un chaval inglés de 15 años hace un breve informe, durante sus "prácticas" en Morgan-Stanley, sobre cómo los jóvenes usan los medios. No es un estudio riguroso, exacto, imparcial,... pero es la visión de uno de los llamados "nativos digitales".

A tener en cuenta como una voz de lo que hacen y son, dicho por ellos mismos y no por académiccos que hace tiempo que no han salido al terreno de los jóvenes de verdad.

La noticia en el diario Expansión.

martes, 4 de agosto de 2009

Parte de nuestra vida en la nube

Un reportaje interesante acerca del uso y extensión del Cloud Computing, publicado en El Pais.

Buen artículo para pensar y debatir...

miércoles, 22 de julio de 2009

Otra fuente de Libros2.0

Y en mi caminar por la web en busca de libros2.0 -continuando la idea del post de mismo título, aparcada, no abandonada- encuentro la web de Ageteca (Asociación de Gestores y Técnicos Culturales) con una página de título Cultura Digital con referencias de cerca de 80 libros2.0 (algunos más que otros).

¡Qué cantidad de lectura me queda por delante! No me da la vida...

Otra visión de la web


El ensayo "El mundo a través de una pantalla", del periodista Lee Siegel, es una visión ácida de la cultura y sociedad que Internet está creando. El título en inglés, '''Against the machine''', deja mucho más claras las intenciones que su traducción al español. En la introducción ya fija el tono de lo que será el resto del libro, contanto su experiencia como escritor del blog cultural del diario The New Republic Online, en el que tratando de responder a críticas de sus escritos carentes de netiqueta, se creo un personaje, "sprezzatura", para responder en sus mismos términos. Según explica en el libro, lo que a unos les era permitido (los trolls que inundaban el blog de insultos y descalificaciones) fue descubierto en su personaje y le valió el despido, además de las críticas de toda la blogosfera.
En el inicio del libro trata de presentar una postura no "del todo" contraria a Internet, y escribe

"Todo aquel que piense que la innovación tecnológica es dañina por sí misma es un chiflado carente de imaginación (...) Pero cualquiera que niegue que la tecnología tiene el potencial para perjudicarnos si no se emplea debidamente, es un artificioso o un ingenuo."

Y esta última frase marca el relato del libro, aumentando bastante el tono a medida que se lee en remarcar los peligros y problemas que quedan ocultos bajo el entusiasmo de otras visiones de la revolución social creada por la web.

Lo cierto es que relativizando la agresividad que muestra a lo largo de todo el libro, las tesis que mantiene y defiende son observables (en mayor o menor medida) en la sociedad actual. Lo que escribo a continuación son algunas de las opiniones u observaciones que hace el autor en este libro.

Internet lleva a una sociedad que permite el "acceso" y la "elección" a y sobre casi cualquier cosa. Tenemos acceso a cualquier producto o información de manera casi inmediata y podemos elegir entre esa gran variedad. Eso es bueno, si no fuese porque, en ocasiones, la interpretación es que '''lo quiero todo y ya'''.

Además, la web2.0 ha hecho posible que cualquiera pueda expresarse en Internet, lo cual también sería bueno, si no fuera porque la realidad es que en la blogosfera aparecen quizás demasiadas voces, muchas de ellas alejadas de una mínima netiqueta (o incluso, siempre según el autor, formación intelectual necesaria... tesis muy cercana a la de Andrew Keen y su "Culto del Aficionado" que, sorprendentemente, no nombra en el libro). Y ¡ay! de quien se atreve a oponerse a esas voces, que es rápidamente desprestigiado y convertido en contrario al progreso.

Internet ha hecho que nuestros momentos de ocio se conviertan en negocio. Incluso los personajes que controlan el mundo de la web son bohemios, intelectuales, típicos frikis, geeks, reconvertidos a hombres de negocio que han hecho de su afición un trabajo. Y, según Siegel, todos estamos haciendo lo mismo.Cuando navegamos, si escribimos en un blog, si usamos las herramientas web2.0, si vendemos o compramos en eBay, usamos lo que antes eran momentos de ocio para seguir haciendo, en cierta manera, negocio.

O para autoexpresarnos; para intentar hacernos famosos en Internet con un video de youtube, con un blog, con comentarios en la web,... Y lo que parecería una semilla de originalidad y nuevas manifestaciones culturales (alcanzar, por fin, el sueño de que la cultura sea cosa de las masas) no hace sino uniformar aún más cualquier tipo de expresión cultural, pues debe seguir los cánones habituales y conocidos para triunfar. Según Siegel, es el triunfo de la imitación y la muerte de la originalidad.

Y para acabar, arremete contra el propio net-individuo o, como él llama, el Homo Interneticus, y finaliza el libro con el siguiente párrafo demoledor:

"Hay una sola persona en el mundo que se conecta con nosotros de forma completa, antiséptica y sin miedo a ser valorada o rechazada. Es alguien que se encuentra en el mismísimo corazón de nuestros deseos para conseguir la comodidad. Está al otro extremo de nuestras muñecas y dedos. Cuanto menos necesite la presenca real de la otra gente, más dependerá de los bienes y servicios para que le hagan compañía y pueblen su asilamiento. Cuanto más entretenido y concurrido se encuentre en su aislamiento, más medirá a la gente por su capacidad de complacerlo o gratificarlo sin que le confronten, pues el único semblante que podrá aguantar es el suyo propio."

El libro es muy crítico, pero no está mal leer lecturas tan contrarias a la corriente actual de entusiasmo para bajarnos un poco al mundo real. Aunque en este caso sea, como digo, tan pesimista.

Acabando por el principio...del mundo digital


Por fin he dispuesto de tiempo para leer muchos de esos libros que se iban acumulando en mi biblioteca y le toca ahora al que quizás debería haber sido el primero: "El mundo digital" (Being Digital) de Nicholas Negroponte (disponible en Scrib, aunque no se si con permiso del autor).

El libro fue publicado por primera vez en el año 1995 pero es un buen ejercicio leerlo a día de hoy para observar cómo predicciones que en él se hicieron se han cumplido de manera certera e, incluso, quedándose algunas algo cortas.

El libro toma como base la migración del átomo al bit, expresión para representar la evolución del comercio y uso de lo físico (un libro, una CD, etc...) al comercio y uso de lo digital (el fichero electrónico de dicho libro, los ficheros en formato audio digital, etc...). Tirando del hilo en el libro se percibe y prevé (acertadamente) los problemas con la propiedad digital, los nuevos modelos de negocio, la facilidad para recibir información personalizada y la necesidad de herramientas (agentes los llama) que nos ayuden a discriminar aquella afín a nuestros intereses, la popularización de las conexiones a Internet, el desplazamiento del ocio y el negocio de la TV al ordenador, etc...

Términos como RSS, The Long Tail, Net Neutrality, Infoxicación, Grid-computing, analfabetismo digital, remixing, mash-up, cloud computing, ubicuidad, pervasividad e inteligencia ambiental... no aparecen explícitamente en el libro pero están presentes en los ejemplos y escenarios futuros que plantea.

Es, podríamos decir, refrescante leer este libro y ver como ideas imaginadas por alguien -con mucho tino y visión, por ello es quien es- han llegado a ser realizadas y aceptadas, hoy en día, como algo casi normal.




martes, 21 de julio de 2009

Complícalo y disimula (y II)

He encontrado la referencia al artículo al que hacía referencia en el post anterior: "Antes muertos que sencillos" de Pilar Cambra, publicado el 18 de Noviembre de 2007 en la edición impresa del diario El Mundo.

Cada vez que lo leo me parece más actual. ¡Qué habilidad al describir una práctica tan común en muchos!

lunes, 6 de julio de 2009

Complícalo y disimula

Ahora lo entiendo todo. Siempre me ha parecido curiosa la habilidad que tienen algunos para complicar las cosas, con la idea de que parezcan importantes. Si algo es sencillo no puede ser bueno; si algo es enrevesado, complicado -aunque la idea que esté detrás sea sencilla-, es importante. Y así le dan muchas vueltas a algo, lo "oscurecen", lo llenan de términos abstractos, sin sentido, pero que suenen importantes y ¡ay de tí si pretendes entenderlo o simplificarlo!; la respuesta que te darán es "cállate, que lo que pasa es que no entiendes ni sabes nada..."
Es una costumbre muy extendida en muchos ámbitos de la sociedad, incluso en la empresa, como se refleja en la columna de opinión "Antes muertos que sencillos" (tengo que buscar la referencia...)

Pero resulta que todo viene de un incorrecto uso de la cita del filósofo Baruch Spinoza:

Sed omnia praeclara tam difficilia quam rara sunt
(Pero todas las cosas excelentes son tan difíciles como raras)

Deberían darse cuenta que no puede darse la vuelta: no por complicar algo y hacerlo difícil, se vuelve excelente.

lunes, 29 de junio de 2009

iPod para aprender

La Universidad de Zaragoza ofrecerá contenidos a través de la plataforma iTunes de apple, en su categoría iTunes U (de University). De este manera, junto con la Universidad de Vigo, la Universidad de Zaragoza se convierte en pionera en el uso de tecnologías muy encasilladas, hasta ahora, en el campo del ocio y el entretenimiento.
Es esta una iniciativa en la línea de modernización y uso de las nuevas tecnologías que el rectorado actual planteó en su programa electoral. Ahora sólo hace falta que quien debe generar los contenidos, que son el cuerpo docente e investigador, sepa qué es esto y sepa adaptarse a los tiempos modernos.

lunes, 30 de marzo de 2009

El sueldo del jefe...

... puede verse afectado por las opiniones de sus subordinados, o así lo entienden en algunas empresas, tal y como se lee en "Cuando el salario del jefe está en manos de su equipo", publicado en el diario Cinco Días.

¡Ay, si de verdad eso se aplicase en algunos sitios...! Igual las cosas irían mejor... o no.

jueves, 19 de marzo de 2009

Reputación y visibilidad

Más acerca de la reputación digital y la gestión de esa parte pública que exponemos si estamos en Internet. Un nuevo libro en el mercado "Visibilidad. Cómo gestionar la reputación en Internet", en el que se incide sobre el tema que ya he comentado en otras entradas del blog.

Nueva lectura pendiente (estas vacaciones voy a tener trabajo...)

viernes, 20 de febrero de 2009

Esfuerzo silencioso, espíritu web 2.0

Hablando hoy con una compañera me descubre la web de D. José Mª Sorando Muzás, profesor de Matemáticas del I.E.S Elaios de Zaragoza.

Una web llena de recursos, materiales y curiosidades matemáticas que son un auténtico tesoro para cualquier docente o, simplemente, amante de las matemáticas.

El sitio es a la antigua usanza, nada de aspecto blog, diseño minimalista, etc... títpicos de la web2.0. Es un sitio web 1.0 puro, con un diseño descuidado, no homogéneo, antiguo...

¿Estoy criticándolo? ¡Al contrario! Es un ejemplo de sitio en el que prima el uso de lo que contiene, su riqueza, su practicidad antes que el diseño y la ornamentación.

Además, su aspecto o las herramientas usadas no serán web2.0, pero está lleno de su espíritu. Materiales de libre uso, variedad de contenidos y referencias a autores y otros sitios, noticias o novedades muy actualizadas, nada de "ultima modificación...hace tres años"...

Este sitio es web2.0 de verdad, aunque no lo sea su aspecto. Otros pretenden apuntarse al carro de la web2.0 sin entender esto y así les va. Subirse a la web 2.0 es entender que el diálogo ágil, la remezcla de contenidos, el compartir y colaborar es mucho mejor que encerrarse en el castillo del "yo soy el único que lo hace bien". Por ello a la web2.0 se le denomina web social...

Desde luego D. José María ha sabido entender ese espíritu (por lo que interpreto de su web, pues no lo conozco personalmente), mucho antes de toda esta revolución y, supongo, que sin que nadie le diga nada.

Compartir es la mejor de las riquezas que uno puede recibir.

domingo, 11 de enero de 2009

Lo que se dice de ti

Publican hoy en el suplemento de economía de El Heraldo de Aragón una reseña sobre Cierzo Development, una empresa aragonesa dedicada al mundo de las nuevas tecnologías e internet.

Lo que quiero destacar de esta empresa es su línea de negocio dedicada al seguimiento de lo que de alguien (sea persona o empresa) se dice en Internet, seguimiento que se realiza por medio de su herramienta Smmart.

Esta noticia es la concreción de lo que hace ya tiempo comentaba en una entrada "Vida y reputación Digital" acerca del Personal Branding. No se si la herramienta tiene demanda suficiente para mantenerse en el mercado. No se si la cultura empresarial por estas tierras es suficientemente "adulta" para admitir que la gente hable de ellos (bien...y mal) y saber unirse a la conversación sin caer en la descalificación del que los critica.

Muy cercano a mí tengo un ejemplo de alguien que no quiso preguntar a sus clientes la opinión por si a alguno se le ocurría decir algo negativo. Desde luego para estos la herramienta Smmart no sólo es inútil, sino incluso peligrosa.

Esperemos que el tejido empresarial aragonés sea algo más inteligente. El tiempo lo dirá...